Cuando hablamos de las nuevas tendencias a nivel empresarial y laboral, muchos pensamos en aspectos muy técnicos, que tienen que ver con los conocimientos puros o las denominadas ‘hard skills’. Y aunque las ‘soft skills’ cada día son más valoradas dentro de las compañías y del mercado de trabajo, todavía siguen sin llegar al nivel de influencia de sus ‘hermanas duras’ en cuato a decisiones se refieren. Pero no por ello son menos importantes.

Tomando como ejemplo la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, el pasado 5 de junio, al hablar de sostenibilidad y cuidado del medio ambiente, tendemos a pensar en conocimientos y habilidades relacionadas con la energía, con los residuos, con la química, con la agricultura, con la gestión del agua, con la ciencia... Pero por encima de todo ello, para convertirnos en personas, trabajadores y líderes comprometidos con el medio ambiente debemos centrarnos en las citadas 'soft skills'.

Porque podemos convertirnos en líderes 'verdes’ a través de habilidades no tan técnicas como son la colaboración, la comunicación, la resiliencia o la empatía. Por ello, hoy os hablamos de ocho 'soft skills' imprescindibles en todo líder comprometido con el medio ambiente:

1. Compromiso. Es fundamental ser un profesional comprometido con las causas sociales y que ese compromiso no sea una moda o una etapa pasajera, sino que se convierta es algo cultural dentro de la gestión del líder en cuestión. Debe reflejarse tanto a nivel profesional como personal.

2. Creatividad. La sostenibilidad a menudo requiere soluciones creativas y de vanguardia. Los líderes en este espacio deben ser innovadores y estar dispuestos a explorar nuevas ideas. La sostenibilidad tiene muchos aspectos novedosos para todos y toca tener la mente abierta e innovar para alcanzar el éxito.

3. Colaboración. Como decimos siempre, el cuidado del medio ambiente es una lucha de todos. Por ello, los líderes deben saber buscar asociaciones y colaboraciones con diferentes personas, organizaciones o instituciones con la finalidad de perseguir todos juntos el mismo objetivo.

4. Visión a largo plazo. Ya avisábamos que la sostenibilidad no debe ser vista como una moda o necesidad concreta, sino que debe verse como una forma de pensamiento y de cultura no a largo plazo, sino para toda la vida. Los problemas ambientales son desafíos a largo plazo, y las soluciones requieren una planificación y ejecución a largo plazo.

5. Comunicación. Persuadir, convencer, liderar con el ejemplo... todo ello solo se consigue con una capacidad comunicativa superlativa. Los pensamientos y directrices del líder, en este caso, deben trascender las fronteras de la compañía e instaurarse en las mentes de los trabajadores una vez finalizan su jornada laboral. Los líderes verdes deben ser capaces de comunicar la importancia de la sostenibilidad a nivel interno (sus equipos) y a nivel externo (clientes, partners, stakeholders, prensa...).

6. Gestión del cambio. Otro básico: la sostenibilidad es una tendencia que cambia constantemente y todas las leyes y directrices globales deben ir adaptándose a las circunstancias de cada momento. Por ello, los líderes en este campo deben ser capaces de manejar el cambio y liderar a sus equipos a través de él.

7. Resiliencia. Un concepto que puede servirnos prácticamente para todo en la vida y que, una vez más, su importancia se maximiza. El cuidado del medio ambiente es una carrera de fondo y en ella existen numerosos obstáculos y barreras, tanto económicas como de otros tipos, y los líderes verdes deben ser capaces de superarlas y aprender de esos contratiempos.

8. Empatía. Para rematar, otro básico como es la capacidad de ponerse en lugar de otros. La empatía hacia las necesidades y preocupaciones de las partes interesadas, incluyendo los empleados, clientes, la comunidad y el medio ambiente, es una habilidad clave. Esta empatía puede ayudar a los líderes a tomar decisiones más equilibradas y consideradas.